lunes, 16 de mayo de 2011

XIV RAZON PARA NO VOTAR POR OLLANTA

SERGIO TAPIA TAPIA

Desde: http://www.larazon.com.pe/online/indice.asp?tfi=LROpinion02&td=15&tm=05&ta=2011

Dado que a esta altura de la campaña electoral, los medios de comunicación se vienen alineando tras una u otra de las candidaturas, surge un tema de importancia capital para la reflexión: ¿Cuál será la suerte que deparará a los medios de comunicación, si Ollanta fuese elegido presidente del Perú, este 5 de junio?
La respuesta está en las páginas 57 y 185 del Plan de Gobierno que Ollanta ha ofrecido solemnemente cumplir desde el 2011 hasta el 2016, y por eso lo ha depositado en el JNE, para garantizar su cumplimiento.

Ollanta afirma en la pág. 57 de su Plan: “… los medios de comunicación han sido tradicionalmente controlados por unos cuantos grupos familiares y por el Estado durante el siglo XX. El primer gran cambio en este tema se dio en 1968. Se anunció inicialmente que se los entregaría a los sectores sociales organizados, pero en la práctica fueron confiscados para ponerlos al servicio del gobierno militar (…). En la actualidad, los medios de comunicación están en propiedad de unas pocas manos (incluso la propiedad de varios tipos de medios de comunicación), lo que ha configurado un cuasi oligopolio mediático que atenta contra el derecho de libertad de expresión y el de una información adecuada para la población”.
           
De este diagnóstico de Ollanta, surge su “propuesta política”, que consiste en que “Se asegurará que los medios estén al servicio de la democracia”.
           
En tanto en la pág. 185 del mismo Plan, cuando trata sobre los pueblos indígenas, Ollanta promete: “Velar por una adecuada representación de los pueblos y sus culturas en los medios de comunicación”.

El Plan de Gobierno de Ollanta es un documento largo (198 páginas en tamaño A4), denso (plagado de análisis con fuertes cargas ideológicas), que utiliza afanosamente la inducción (uso y abuso de la estadística para sostener las tesis ideológicas, que de por sí son teóricas y ajenas a la realidad). Para leer este Plan, se requiere cuidar de hallar datos, hacer relaciones entre ellos, y obtener una conceptualización con unidad, a pesar de que las fuentes sean dispersas.
El problema es la relación entre esas dos páginas del Plan, la 57 y la 185.
           
De un lado, a Ollanta le gustó eso de entregar los medios a los “sectores sociales organizados” y no le gusta que la actual tenencia de propiedad de los medios de prensa: ¡Ojo, señores Miró Quesada! ¡Ojo, Baruch Ivcher! ¡Ojito, ojito señorito Mohme!

Y, de otro lado, Ollanta promete y se compromete a dar “representación” a los indígenas en los medios de prensa. ¡Ojo! No les promete que tendrán más o mejor cobertura en las noticias. No. Lo que les promete es “representación en los medios de comunicación”.
           
Representar es sustituir. La riqueza de los términos la dan los usos del lenguaje, así como las construcciones semánticas profesionales. La lengua castellana, así como la jurisprudencia, señalan que representar es lo que hace el apoderado, sustituyéndolo al poderdante.
           
Queda flotando, entonces la pregunta: ¿Para Ollanta a quién sustituirán los indígenas en los medios de prensa: a los propietarios, a los directores, a los contenidos? O, quizá, Ollanta tan sólo se ha querido referir a la sustitución de los lectores.
           
Director Jurídico de UnoAmérica.
           

No hay comentarios:

Publicar un comentario